El vivero
Después de la cría en microvivero, las microsemillas de un tamaño suficiente se crían en el exterior/al aire libre, en viveros.
Los viveros están formados por un conjunto de estanques de cría en up-welling y lagunas conectadas entre sí, lo que permite una buena circulación del agua. La gestión de los aportes diarios de agua nueva, de la cantidad y calidad del fitoplancton, así como de la calidad del ecosistema acuático global son claves importantes para el correcto desarrollo de las semillas. Estos grandes circuitos de agua semicerrados exteriores se controlan a diario para garantizar una calidad óptima del entorno de cría.
Las semillas se trabajan, enrollan, lavan y tamizan con mucha regularidad para obtener moluscos robustos y homogéneos, listos para ser criados en el mar.